El vino, un destino en el camino
Por Alejandro Montandon para Periódico del Este
“Vino nuevo en robles viejos”
Curiosas capacidades de ser errantes tienen las vides. Buenas buscadoras de suelos fértiles y tibios para echar sur raíces han resultado.
Curioso afán el de los hombres y las mujeres que las mudan de país en país, del almácigo al surco, de sol a sol. El raleo invernal desnuda sus ramas y por pudor, les brotan racimos verdes de primavera que el estío irá pardeando hasta el rojo Bordeaux.
Ver, tocar, oler, probar, comparar, criticar hasta marearse en sabores y proseos, son experiencias que les quedan cortas a los también errantes turistas del vino.
Rascan el roble para sacarle el aroma de afrancesada vainilla o el achocolatado picor americano. Chocan las copas de Bohemia, las elevan al sol y el prisma les devuelve arcoíris poliformes en servilletas estampadas con medialunas tintas.
Canelones celebró el Fin de Semana del Enoturismo y por primera vez circuitos turísticos guiados por cuatro bodegas con el opcional de una degustación de tres copas y un precio general de $200 pesos.
La convocatoria fue un éxito que dejó con ganas de más a mucha gente y animó la carrera de los bodegueros incipientes en la actividad.
POLO VITIVINÍCOLA METROPOLITANO
“El turista empezó a golpear las puertas de las bodegas a partir del año 2000 el crecimiento del turismo en Montevideo, hizo que las bodegas comenzaran a abrirse. Canelones tiene el 65% de las bodegas del país, ya en 2011 nos dimos cuenta del crecimiento del Enoturismo” cuenta Juan Carbajal, Coordinador del Polo Vitivinícola Metropolitano.
“Allí nos presentamos a unos fondos de la diputación de Barcelona para el desarrollo de las actividades, ganamos los fondos en cuatro instancias consecutivas en 5 años, venían técnicos de Cataluña a contarnos que pasaba en el mundo desarrollado, llevamos bodegas allá y de ese modo comenzaron a conocerse entre sí y los empezamos a conectar a hacer Enoturismo entre las propias bodegas locales”
La recorrida comenzó temprano por bodega Moizo, de las pioneras en Enoturismo y que cada vez más planea su propuesta comercial pensando en los visitantes.
Adaptó un local moderno a los requerimientos de servicio y al gusto de los turistas.
Omar Moizo, dijo que la idea es “que el público tenga una experiencia enoturística, que pregunte, que se lleve algo para su casa, que sea enriquecedor para la persona y guiándolos de manera amena y didáctica”
EXPERIENCIAS SENSORIALES
Alberto Viana es guía turístico de profesión. Trabaja para empresas del exterior y hace orienta grupos también fuera del país. Está descubriendo en el enoturismo y es una actividad que le ha gustado mucho sobre todo por el aprendizaje “uno compra un vino para disfrutar y saborear, pero saber cómo se produce, todo el trabajo que hay, está muy bueno “comenta.
La intendencia de Canelones orientó las visitas hacia cuatro bodegas como punto de partida de lo que en breve será integrar el circuito de los caminos del vino y tendrá su kilómetro cero en la Escuela de Enología en Las Piedras que será a su vez la nueva sede del Museo de la Uva y el Vino.
Gabriela Romero es integrante de la Dirección de Desarrollo Turístico, dijo que “la convocatoria superó las expectativas, en un principio, hubo gente en espera y tuvimos que incorporar otro ómnibus” “son bodegas familiares muy distintas algunas nuevas y otras que ya están trabajando”
La bodega Ariano se acerca a los 90 años “es una bodega tradicional, fue fundada por mi abuelo Adelio Ariano, Piamontés, hoy somos la cuarta generación y le seguimos poniendo pasión a este negocio” asegura Sebastián Ariano referente.
“La expectativa del enoturismo es un desafío y se vincula con Brasil especialmente y con amigos uruguayos que quieren venir a disfrutar nuestros vinos”
La Bodega Castillo Viejo inició la segunda etapa del viaje por el este pedrense y su enóloga Alejandra Pizzurno, nos recibió en una cava de principios del siglo 20, hoy adaptada como salón de eventos y culto al vino. “Los viñedos están más lejos y queremos incursionar en tener vinos de distintas regiones”, en cuanto a la exportación “está yendo para Brasil, Méjico, Paraguay, Bolivia, Estados Unidos”. Cuenta que estando en una bodega en Adelaida conoció un establecimiento que produce 80 millones de litros de vinos cuando Uruguay produce 100 millones” comentó, a efectos de comparar e ilustrar sobre las dimensiones de los países.
Erika Marques es brasileña, de Fortaleza, del extremo norte del país vecino, “es una oportunidad, que le gusta muito, especialmente el Tannat, tiene conocidas dos bodegas, pero a veces resulta muy caro y esta oportunidad de recorrer fue perfecta” opinó.
Verónica Hernández, canaria de capital dice estar “encantada y asombrada por lo que le informan las personas a cargo de las bodegas, saber que detrás de cada botella hay tanta historia, en el clima. Es una riqueza maravillosa”
Francisco Pizzorno, de Bodega Carlos Pizzorno es presidente de ATEU (Asociación de Turismo Enológico del Uruguay), “promovemos mucho este día , es para festejar y mostrar lo que hacemos, queremos mostrar la bodega como un lugar más que accesible”, “en nuestro caso, más de la mitad de nuestra producción está dedicada al a exportación, siendo Brasil un mercado muy importante para nuestro vino, el 95 % de nuestros visitantes son extranjeros y el 86% brasileños , esto retroalimenta la exportación”
“Buscan el vino como un elemento de unión, han pasado hasta alguna luna de miel aquí”, “todos los días del año dictamos una master class donde nuestros enólogos dirigen a través de una degustación para que la próxima compra sea mucho más dirigida”
El Néctar de los dioses de tantas culturas, podrá enlentecer al viajero su andar y pedirle descansar de tanto en tanto, pero las raíces siguen hurgando la veta de agua como un rabdomante experiente y obstinado. Los caminos del vino parecen no tener fin, pero en Canelones, le sobran principios.